¿Cómo contribuir a reducir el sufrimiento de los animales?
Esto es lo que puedes hacer para ayudar a los animales
En tanto consumidor, dispone usted de todo un arsenal de recursos para detener los abusos de las granjas factoría.
A continuación damos a conocer algunos de ellos, sin perjuicio de que el lector añada por su cuenta los de su propia cosecha.
Detenga a las granjas factoría a través de lo que usted come
Tal vez sea este el medio más efectivo a su
disposición: ¡Basta de dar dinero y de
tornar lucrativas a las granjas factoría! No
más productos de esa procedencia en su mesa diaria.
Detenga a las granjas factoría a través de lo que usted come
Deje de consumir productos animales de procedencia extranjera.
Las objeciones bienestaristas apuntan principalmente a
aquellos productos de importación animal. Después
de todo ¿por qué debería un país
verse forzado por consideraciones puramente comerciales
a devastar su propio territorio y a dilapidar sus propios
recursos naturales? Está claro que esto se da de
patadas con una concepción de la vida y del trabajo
que haga lugar a relaciones equilibradas y amistosas con
el mundo animal. A propósito, estas prevenciones
se aplican muy especialmente a los productos procedentes de Holanda. De usted
depende elegir en base a un criterio ecológico
responsable aquellos productos que no evidencien perjuicios
ecológicos. Por ejemplo, aumento su ingesta semanal
de comidas sin carne, múltiples ideas para la preparación
adecuado de platos vegetarianos pueden encontrarse en
la Vegetarian
Union. Productos procedentes de granjas orgánicas
son una adecuada alternativa para suplir aquellos otros
provenientes de granjas factoría.
En torno de este último punto se verifica con frecuencia
un extraño fenómeno, y es que la gente que
más solícitamente cuida de su salud alimentaria
en el interior de sus hogares, tira sus propios conceptos
por la borda cuando se ve forzada a ingerir alimentos
basura en el trabajo o en la escuela. Suele argüirse,
cuando esta modalidad es criticada, que no es posible
observar con el mismo rigor lo que ingerimos en nuestros
hogares que aquellas comidas al paso con que nos quitamos
el hambre en un buffet público o en la calle. En
parte es así, puesto que cuando preparamos nuestra
comida en la intimidad conocemos exactamente los productos
empleados, en tanto que cuando la solicitamos a quien
nos la vende preparada resulta imposible dicho rigor.
Deje en claro cada vez que ordene su comida en un restaurante
que deberá ésta proceder de granjas ecológicas.
No le compre a compañías cuya preocupación por los derechos animales pueda ser puesta en duda o no sea comercialmente evidente para sus consumidores
Casi siempre usted podrá
hacer uso efectivo de su poder de compra -que es muy
tenido en cuenta por toda compañía comercial-
por el simple expediente de rehusar una compra allí
donde ésta no satisfaga plenamente sus exigencias
como consumidor ecológico. Imagine usted que
vende salchichas y dos o tres consumidores por día
entran a su negocio y finalmente se rehúsan a
comprar nada alegando que participa usted con un negocio
despiadado. ¿No se preocuparía usted?
No abra cuentas bancarias en aquellas casas de crédito
asociados comercialmente en calidad de prestamistas
con las granjas factoría.
No compre en supermercados que no le ofrecen productos
ecológicos. Si anda pensando en invertir su dinero
hágalo en emprendimientos ecológicos.
Chequée periódicamente la información
que le proporcionamos a fin de enterarse de cuáles
compañías tienen en cuenta los derechos
animales y cuáles no.
No regale su voto
Durante cada acto comicial, evite en la medida de lo posible
prestar su apoyo a aquellos partidos o listas de candidatos
que no hayan declarado expresamente su repudio a las
granjas factoría. Acérquese a los partidos
políticos y requiera de ellos sus programas concernientes
a las condiciones de explotación agrícola
y ganadera. Muchos parlamentarios pueden ser contactados
y consultados a través del sistema de e-mails.
Incluso en los casos en que el partido al que usted
pertenece no se manifieste claramente respecto de los
puntos de controversia ecologista, no vacile en elegir
a otra lista que sí lo haya hecho y en la que
pueda usted confiar. Porque ha llegado la hora de hacer
a los partidos políticos responsables por los
derechos animales.
Consulte la sección "taking action"
para interiorizarse del mejor modo de demandar soluciones.
Proteste contra los permisos otorgados a las granjas factoría
Usted tiene derecho legal a rehusar que en las inmediaciones de
donde usted vive se instale una granja factoría,
dados los niveles de polución ambiental que tal
cosa implica. Asóciese a tal efecto con otros
vecinos que compartan su punto de vista. Podrá
recibir un adecuado asesoramiento legal en aquellos
centros municipales dedicados a la protección
del medio ambiente. Para averiguar direcciones y nombres,
diríjase usted a la página correspondiente
a "national and local action groups". Incluso
en aquellos casos en que las granjas factoría
hayan recibido el permiso de explotación, es
posible iniciar acciones legales si usted es capaz de
demostrar los perjuicios que comporta la acción
de ellos.
Escriba a los diarios y revistas
La sección de cartas de lectores tiene un vasto
público y es posible, a través de ellas,
difundir nuestros principios a aquellos que nada saben
del tema o que aún titubean al respecto. De usted
depende que mucha gente, gracias a su carta, tome conciencia
de las situaciones de agravio ecológico provocado
por las granjas factoría. Las posibilidades de
que su carta sea publicada se acrecientan si en ella
alude usted a un artículo previamente publicado
en el mismo diario al que usted se está dirigiendo.
Lea también nuestros "wirting tips".
Tenga en cuenta también la posibilidad de enviar
sus cartas a través del correo electrónico
ya que muchos diarios tienen su respectivo sitio en
Internet.
Cada vez que vea usted a través de un medio masivo
de difusión la publicidad en favor de la explotación
animal, haga llegar su debida protesta ciudadana al
"Code of Advertising Commitee".
Apoye a las organizaciones que luchan en contra de las granjas factoría
Las
organizaciones que se debaten mundialmente en contra
del negocio multimillonario de la explotación
animal se hayan legalizadas y difundidas en muchísimos
países del mundo. En el suyo propio podrá
usted hacer efectiva su contribución, o bien
plegarse a ella en acciones concretas e institucionalizadas.
Incorpórese como voluntario y ayude a dar una
existencia digna a los animales. Consulte la base de
datos ofrecida por Animal Freedom para asesorarse acerca
del voluntariado que dicha organización ofrece,
o alguna otra en actividad en las cercanías de
su vecindario. También puede usted dirigirse
personalmente a nosotros y dejar sentada su inquietud
o la iniciativa que le gustaría ver puesta en
marcha.
Haga clic aquí para una donación.
Jamás deje de manifestar su empatía hacia los derechos animales
Resulta difícil estipular qué tan lejos
debe usted llegar en su lealtad al ideario animalista.
Si exagera demasiado, podría resultar pernicioso.
Por el contrario, si calla, lo más posible es
que nadie se dé por aludido cuando se hablan
de estos temas. ¿Está usted cenando junto
a sus amigos? Pues bien: no trepide usted en dejar en
claro delante de ellos que no aceptara ninguna carne
proveniente de granjas factoría. ¿Está
usted de shopping este fin de semana? Hágale
saber a los vendedores que lo atiendan que solo está
dispuesto a gastar dinero en mercaderías de origen
ecológico. Haga extensiva su prédica,
en la medida de lo posible, a aquellas personas en quienes
intuya usted de antemano una cierta predisposición
favorable hacia estos temas. No gaste sus energías
en intentar polemizar con personas cuya hostilidad hacia
nuestro ideario es palpable. No se estrese inútilmente
en batallas verbales que a nada conducen. Sea conciso
cuando argumenta, y evite hacer sentir atacados a quienes,
por el momento, todavía no piensan como usted.
Si busca usted reforzar su arsenal argumentativa, consulte
nuestra "argumentos
no-validos". Si tiene dudas o disiente usted
con algunos de nuestros items, háganos llegar
su propuesta vía e-mail. En lo posible, que sus
acciones se mantengan siempre dentro del terreno institucional,
que es justamente el que queremos colonizar a fin de
verle cumplir con el cometido que nosotros le atribuimos,
esto es, el de establecer las bases de una convivencia
equitativa entre especies animales y medio ambiente.